Los placeres, qué haríamos sin ellos, son los que nos
motivan y los que acaban siendo nuestros vicios. Es imprescindible que todos
los individuos del planeta tengan accesibilidad a estos. Pero… ¿qué es
placentero para cada uno?
Las personas presentan ciertas inclinaciones hacia
distintos placeres pues experimentarlos es algo muy personal. Nunca antes me
había parado a pensar que me resulta placentero únicamente a mí, pues ahora
mismo rondan por mi cabeza muchas cosas, sin embargo éstas también resultan
placenteras para la mayoría. Escuchar música, dormir, comer y un largo etcétera
son acciones que me gusta realizar pero no tienen nada de especial.
Por lo tanto,
aquello a lo que puedo asignarle el nombre de "pequeño placer" es
hablar con los individuos que me rodean y sentir que éstos participan en la
conversación. Es algo insignificante a lo que estamos acostumbrados por lo que
no suele aparecer satisfacción al intercambiar diversas palabras con las
personas que nos rodean. Sin embargo a mi me resulta fascinante que existan
personas dispuestas a contarte miles de historias, consejos, tonterías... no presenta
importancia lo que el individuo suelte por la boca pues el mero hecho de que se
dirija a mí, me observe detenidamente, me preste atención y me dedique su tiempo,
es satisfactorio.
Mantener conversaciones es divertido dado que a veces resulta
interesante conocer la forma de ver el mundo de aquellos que se encuentran a tu
alrededor.
"Intercambiar ideas, discutir, llegar a un acuerdo,
alagar, respetar..."
Reconozco que no soy una persona extrovertida,
sin embargo me gustaría serlo y creo que con el tiempo lo conseguiré. Esta
característica que me define hace que la mayoría no se acerque a mí para
mantener una conversación por eso me resulta placentero cuando hablo con
alguien personalmente.
También me agrada cuando me llaman por teléfono, es un
tanto increíble que existan personas con ganas de escuchar mi extraña voz, la
cual considero bastante peculiar (como mi forma de escribir). Debo reconocer
que me gusta parlotear con las personas que se muestren dispuestas a ello
aunque siento preferencia por algunas. Hablar con personas que tienen
experiencia vital o aquellas que
presentan algún tipo de hobbie fuera de lo común siempre tienen algo
interesante que aportar pues son cosas que desconozco y las cuales despiertan
atención en mi ser.
También me gusta hablar con mi padre, nuestras
conversaciones, a mi parecer, son entretenidas y siempre acaban con una
enseñanza; y sobre todo con mi monitor de natación que siempre me dedica sus
mejores e ingeniosas vivencias. El mero hecho de hablar con personas que
presentan características extremadamente diferentes y gustos diversos me
resulta placentero y, a su vez, beneficioso ya que me permite ampliar mis
conocimientos y descubrir detalles de los que nunca había oído hablar.
Cabe decir que existen multitud de temas de los que
hablar y como es evidente, tengo preferencia por unos más que por otros. Es
interesante conocer cómo afrontan otros este juego de hacer exámenes y aprobar
asignaturas o cómo era la vida anteriormente. A pesar de todo, entre los temas
estrella siempre permanecerán los gustos musicales y cinematográficos junto a
los libros y los acontecimientos del día a día.
Observar las distintas reacciones de las personas
dependiendo de la información que estén recibiendo sus respectivos cerebros también
me produce un leve placer dado que es divertido y me permite indagar en el
carácter de estas.
A medida que voy desarrollando este artículo me estoy
percatando de que no podría vivir con normalidad si no tuviera lugar al menos
una conversación al día. Me encanta comunicarme con el mundo exterior ya sea de
forma verbal o escrita aunque no niego que me resulte atractivo explorar mi
interior y hablar conmigo misma. Aunque se trata de algo chocante, mantener una
conversación contigo mismo no es nada del otro mundo, la mayoría de las veces lo
hago involuntariamente pero aquellas en las que si estoy presente realizo una
especie de monólogo interior rarísimo el cual carece de sentido.
Desde mi punto
de vista este pequeño placer no es realmente único y exclusivo de mi persona,
como bien sabemos el ser humano tiene la necesidad de comunicarse, somos seres
sociales, por lo que otros muchos individuos también reconocerán el dicho como
uno de sus pequeños placeres vitales, no obstante darse cuenta de esta
interesante acción que realizamos rutinariamente, lo es, se trata de algo menos
común.
"La comunicación, esencial para los individuos
humanos, placentero para una alumna de segundo de bachillerato"
Estoy totalmente de acuerdo contigo, los placeres son algo de lo que disfrutamos dia a dia, pero realmente es placer de comunicarte con alguien es maravilloso, por ejemplo a mi me encanta hablar con mis amigas, sentirme escuchada y que la gente que me escucha muestre interes en mi y si tengo algun problema me ayude a resolverlo. Soy una persona extrovertida, me gusta conocer gente nueva, por tanto este placer, como es la comunicacion ,lo disfruto a menudo. Obviamente hay muchisimos placeres mas, pero para mi este es el que mas me gusta
ResponderEliminarLa comunicación es algo esencial para los seres humanos, ya que sin ella la vida seria muy aburrida porque siempre te encontrarías solo. No poder expresar tus pensamientos e ideas seria algo verdaderamente frustrante. Por tanto para mi la comunicación es uno de los mayores placeres de la vida, Porque ami, en particular, me encanta hablar, no puedo quedarme callada nunca.
ResponderEliminarMe considero una persona muy charlatana, de las que desde el primer momento si me dejaran hablar no me callaría nunca. Y creo que mis amigas lo saben demasiado bien..
ResponderEliminarLa comunicación en mi es uno de mis mayores placeres, aparte de la música y dormir..
Para mí la comunicación es esencial ya que no me imagino una vida sin comunicación, sin compartir ideas, momentos y charlitas con las personas más importantes de mi vida.
Me gusta hablar y que me escuchen, pero sobre todo me gusta escuchar e intentar aconsejar, sentirme alguien en la que la gente pueda confiar y sentirse agusto.
Hay otros muchos pequeños placeres que se unen a este gran placer, el conocer gente... conversar con personas que nunca antes habías conocido y poder conocer otros ambientes y compañías.
Pienso que no hay sólo una forma de comunicación, que aparte del lenguaje, la música te ayuda a comunicarte con los demás.
Hay veces que se necesita estar callado, pero ''el que calla no siempre otorga, aveces no tiene ganas de discutir con idiotas''.
Gema, 1ºbach A.